Tras un larguísimo paréntesis veraniego, me dispongo a retomar el blog. Nadie me pidió que lo abriese y nadie me urge a que lo continúe. Sin embargo -y en la medidas de mis posibilidades y mis perezas-, estoy determinado a seguir con él.A diferencia de lo que pensaba hace seis meses, ahora no me propongo ser sistemático. Sólo quiero dejarme llevar por la música que oigo -por las noticias que me llegan de ella- y dejar constancia en esta página. ¿Para qué? Esencialmente, para mí mismo. Para dibujar una cierta huella en el tiempo o, mejor, marcar las huellas que él ha dejado en mí. Para atarme más sólidamente a la música y pagarle, en parte, todo lo que le debo.
Y si alguien saca algún provecho de estas páginas, pues bendito sea Dios. Hasta pronto.
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